-Ania necesitamos cumplir el plan, hoy trabajaremos hasta bien tarde.
-Tú sabes como es eso, dice Ania, aquí no hay miedo Adelaine, así que ya tu sabes, está demás que me digas eso, esto es hasta que se esconda el sol.
Es la conversación de dos trabajadoras del Taller de Confecciones en el municipio camagüeyano de Carlos Manuel de Céspedes, quienes en la jornada laboral se intercambiaban unas palabras.
Orialy Desagües directora de la entidad refirió:
Esto es diario, ellas no escatiman hora para trabajar, para lo que se necesite, responden con tremenda disposición y sentido de pertenencia.
En este Taller de confecciones del municipio camagüeyano Carlos Manuel de Céspedes laboran poco más de cincuenta féminas enfrascadas en la fabricación de diversas piezas textiles.
En estos momentos uniforme escolar para los centros educacionales de la provincia es el trabajo que urge.
Las mujeres en este colectivo entregan horas extras en aras de cumplir y sobre cumplir el plan de producción.
Hasta la fecha, con más de treinta años de explotación, el taller de confecciones en Céspedes, se ubica entre los mejores en la provincia.
Este es el resultado de las manos dulces de marianas de estos tiempos, comprometidas con el momento histórico que les ha tocado vivir.
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