Todo jugador de béisbol sueña con decidir un juego y darle la victoria a su equipo. Para que esto ocurra ha de ir cientos de veces al bate y quizás nunca consiga ese momento de hacer temblar el estadio.
Marino Luís Márquez, natural del poblado de Piedrecitas, en el municipio camagüeyano de Carlos Manuel de Céspedes, Cuba, tiene la satisfacción de haber decidido más de un juego de pelota en los clásicos nacionales cubanos. Sin embargo su momento inolvidable fue aquel miércoles 21 de enero de 2009 cerca de las 2:00 p.m. de la tarde ante el lanzador Yoan Socarras…
Día en que conectó un doblete al Center field en el Frank de Berch de Guanabacoa en Ciudad de la Habana, era el número 1000 en Series Nacionales. Se convirtió así en el primer cespedeño que logra esta marca.
Nadie lo dude, vendrán otros peloteros del patio y conseguirán nuevas metas. Ese atleta quizás sea hoy un niño que hace swines al aire pero sin dudas, tendrá en su mente la forma de batear de Marino Luís, la hazaña cespedeña.
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